El Museo Diocesano de Massa se encuentra en las salas de la planta principal del antiguo Palacio Episcopal, construido en el siglo XVI para los hijos no primogénitos de la familia ducal Cybo-Malaspina y posteriormente, de 1822 a 1970, sede de los obispos de la diócesis de Massa.
El museo fue creado para salvaguardar y valorizar el patrimonio artístico de las iglesias del territorio diocesano. Algunas obras se conservan en la pinacoteca permanente, por razones de seguridad, mientras que otras se exhiben de forma rotativa dentro de exposiciones temáticas que permiten profundizar temas específicos y sensibilizar sobre aspectos de la cultura artística poco conocidos por el público.
Se destacan un retablo de Bernardino del Castelletto, realizado para el convento de Santa Elisabetta y destinado al altar de la capilla del obispo, pero también la estatua de San Leonardo de Jacopo della Quercia (1420), la Piedad de mármol tallada por Gelice Palma y una cruz atribuida a Gian Lorenzo Bernini.
El museo consta con una sección dedicada a la Catedral de los Santos Pietro y Francesco, la principal iglesia de Massa y uno de los tesoros más importantes del centro de la ciudad.
