En los últimos años, Prato se ha convertido en un importante punto de referencia europeo en lo que se refiere al arte contemporáneo: además del famoso Centro de Arte Contemporáneo Luigi Pecci, hay otras obras de arte de artistas italianos e internacionales que se encuentran en el centro histórico y los suburbios. Te proponemos un paseo para descubrir la gran riqueza de arte que Prato puede ofrecer.
El paseo comienza en el museo de arte contemporáneo, cerca del cual (en la rotonda entre Viale della Repubblica y Via Catani) se encuentra la escultura de hierro de Eliseo Mattiacci "Reflejo del orden cósmico".
La primera parada en el centro histórico es la Plaza San Marco, donde está la famosa obra de Henry Moore, Forma cuadrada con corte, ha estado en el pequeño jardín desde el 1974, convirtiéndose en un símbolo de la ciudad. Su forma de cerradura indica la puerta de la ciudad, una puerta del pasado al presente. Desde aquí se llega hasta Porta Frascati, cerca de la cual se encuentra el Mazzocchio una obra hecha de tubos de acero en el 1994 por Ben Jacober y Yannik Vu. La obra representa el factor que dividió a los artistas de finales del siglo XV en dos grupos: los que podían dibujar en perspectiva y los que no.
Un punto principal en el paseo del arte urbano es el complejo Campolmi, en el patio de la Biblioteca Lazzerini, donde se encuentra "La bestia" de Bassiri, una escultura de bronce sobre una base de travertino, así como "Waterbones Trepando en Estado de Transición"una estructura brillante de Loris Cecchini.
Cerca del Castillo del Emperador en la Plaza Santa María de Castello se puede admirar la "Grande Soñadora" realizada por Fabrizio Corneliuna instalación verdaderamente evocadora de luz y sombra creada en el 2014 como parte del evento "Prato Contemporáneo". Continuando desde el Castillo hasta la Piazza del Comune, por la escalera en el Palacio Pretorio se puede admirar la impresionante escultura de bronce "Prometeo estrangulando al Buitre II" de Jacques Lipchitz.
El Museo del Palacio alberga 21 esculturas de yeso, un bronce y 43 dibujos del artista lituano que fueron donados en el 2013 por la Fundación Jacques y Yulla Lipchitz y por Hanno Mott.
El recorrido por la ciudad continúa hasta la Plaza Ciardi donde se puede ver: Count up de Alessandra Andrini (Monumento a la resistencia, 2009, Plaza de la Universidad) y El eslabón perdido de la cadena que no existe por Marco Bagnoli, con fecha de 2016.
Fuera de los muros, no muy lejos del centro, a lo largo del Viale Galilei está la Figura antropomórfica de la Isla de Elba de Vittorio Tavernari y, cerca del puente Datini, la gran escultura de bronce "Muerde Palo - Paalbijter" producido por Gijs Assmann en el 2005. La obra, de gran realismo, está vinculada a los temas de la memoria y la Vanitas que provienen del arte holandés del siglo XVII.
Frente al Museo Pecci es la famosa escultura, Exegi monumentum aere perennius, de Anne y Patrick Poirier, que se ha convertido en un símbolo de la ciudad. La estructura representa "las cambiantes fortunas de la civilización" y la agitación de los cimientos que hemos experimentado en nuestra historia reciente a escala mundial. Mientras tanto, en los jardines de Via Carlo Marx, hay una escultura de mármol de Giò Pomodoro dedicada a Pablo Neruda titulada Isla Negra.
Cerca de Prato, no te pierdas el "Museo del Parque Quinto Martini" en Carmignano, un hermoso espacio verde con senderos que pasan a través de 36 estatuas de bronce hechas por Martini.
