
Toscana Etrusca: viaje para descubrir un pueblo misterioso
Desde Volterra hasta Chiusi, un viaje fascinante a través de la historia
Misterio, historia y arte: descubrir Toscana Etrusca significa seguir las huellas de un pueblo fascinante, enigmático desde la antigüedad, incluso los historiadores de la época estaban confundidos sobre sus orígenes inciertos, según Heródoto, provenía del Asia Menor, según Tito Livio de la Europa Central.
Cualquiera fuera su país de origen es desconocido, pero desde el siglo IX al I a.C. se establecieron en el centro de Italia entre los ríos Arno y Tíber y aquí fundaron una civilización distinguida y poderosa, que extendió su dominio desde Toscana hasta el Valle del Po y el Lazio.

Expertos en arte, especialmente en arte funerario, terracota y metalistería, amantes de la música y de los banquetes, los Etruscos dejaron tras de sí espléndidas obras de arte, ciudades y pueblos donde aún hoy se pueden admirar las huellas de su pasaje, especialmente en las doce ciudades que formaban la Dodecápolis etrusca, seis de las cuales se encuentran en Toscana: Chiusi, Vetulonia, Volterra, Cortona, Arezzo y Fiesole.
Si haces un viaje a Toscana tras las huellas de los Etruscos puedes partir de Volterra, visitando la necrópolis, pero sobre todo el Museo Guarnacci que conserva una de las colecciones más importantes de hallazgos etruscos, como el famoso Sepulcro de los Esposos y La Sombra de la Noche, la estatuilla votiva filiforme.
No puedes dejar de ir al Parque Arqueológico de Baratti y Populonia, con vistas al mar del Golfo Baratti, donde se pueden admirar los restos de Populonia, la única ciudad etrusca construida sobre el mar, mientras que siempre en la costa, pero en Maremma, encontramos Vetulonia, con los restos de sus murallas, las tumbas y el Museo Arqueológico Cívico.


Sin olvidar Pitigliano y Sovana, con sus hermosas Vás Cave excavadas en la toba y la Necrópolis donde se encuentra la majestuosa Tumba de Ildebranda, también Chianciano Terme, donde se pueden ver los restos del retablo del Templo de Fucoli y otros innumerables hallazgos del Museo Arqueológico de las Aguas, y Chiusi, con algunas de las más bellas tumbas etruscas pintadas, como la Tumba del Mono y una red de antiguos pasajes que, según la leyenda, podían ser los restos del laberinto de Porsenna.
Te aconsejamos visitar la Tumba de la Cuadriga infernal, que se encuentra en Sarteano en la Necrópolis de Pianacce y es una de las pinturas murales etruscas más fascinantes y mejor conservadas.
Importantes ciudades etruscas fueron también Cortona, donde se puede visitar el museo etrusco MAEC, Arezzo, donde se encontró el famoso bronce de la Quimera - ahora conservado en el Museo Arqueológico de Florencia - y también el área arqueológica de Roselle, en las afueras de Arezzo, Fiesole - que más tarde se convirtió en una colonia romana- y Saturnia, donde los Etruscos ya habían explotado las aguas termales.
