Descubriendo la Montaña de Pistoia a lo largo de la Ferrovía Porrettana

La historia de la línea ferroviaria entre Pistoia y Porretta Terme se enraiza en los años cruciales de Italia, entre las guerras que condujeron a la independencia y la unificación de Italia. El primer embrión de "camino de raíles destinado al tránsito público" se remonta a 1845, cuando los hermanos Bartolomeo, Pietro y Tommaso Cini de San Marcello obtuvieron la autorización del gran duque de Toscana Leopoldo II para realizar los estudios necesarios. Esto condujo a la firma del acuerdo para la construcción del "Camino de hierro de Italia Central", que pretendía conectar el sistema ferroviario austriaco con la red toscana, uniendo a cinco estados anteriores a la unificación: Imperio de Austria, Estado Pontificio, Gran Ducado de Toscana, Ducado de Módena, Ducado de Parma.

Propiedad del Reino de Saboya y más tarde del recién nacido Reino de Italia, la Porrettana se inauguró en 1864 y se convirtió en el principal eje de comunicación entre el norte y el centro-sur. Desempeñó un papel central durante la Gran Guerra y hasta los años treinta, cuando fue superada por la Direttissima Prato-Bolonia.

El viaje comienza en la estación central de Pistoia, a un paso del centro de la ciudad y de la Plaza del Duomo, y continúa con paradas en Piteccio, Corbezzi, Castagno, San Mommè y Pracchia, antes de cruzar al lado emiliano. 

Una inmersión en la exuberante naturaleza de las Montañas de Pistoia, entre pueblos, puentes y túneles.

Además de los trenes de línea, también recorren el trayecto los históricos trenes Porrettana Express, que combinan el encanto de un viaje en los vagones "Cien puertas" y "Corbellini" con experiencias pensadas para familias y niños, como laboratorios didácticos y visitas guiadas a las estaciones.

Oportunidades de visitar lugares cerrados al público, como el Deposito de Maquinarias Rodantes Históricas de Pistoia, un taller-depósito que desde hace más de 150 años conserva locomotoras de vapor, diésel y eléctricas FS, incluyendo piezas únicas como la 741.120, de los años 20, modificada en el 1958, única locomotora en funcionamiento del mundo equipada con el sistema patentado "Franco Crosti" o la D 342.4010, única locomotora diésel hidráulica de los años 50 aún en servicio. 

El recorrido por el Depósito incluye la Sala deEspera Real, construida para el Rey Vittorio Emanuele II, en la que es claramente visible el escudo de los Saboya.

A lo largo de Porrettana, el parada Valdibrana es la sede de la antigua rampa de lanzamiento, que permitía a los pesados trenes de vapor ganar potencia para afrontar las pendientes, y aquella de rescate, además de ser un mirador sobre la cercana ciudad de Pistoia.