El pastel de hierbas de Lunigiana es un plato tradicional preparado con hierbas silvestres y hortalizas de estación.
De color verde intenso, es un pastel salado muy sabroso y se come como aperitivo o segundo plato.
Un plato humilde, que utiliza los productos de la tierra, pero con un sabor auténtico y genuino, que debe su característica a la particular combinación de ingredientes: hierbas locales y hortalizas de la zona, como acelgas, cebollas, espinacas y espárragos silvestres, puerros, zanahorias.
Todo ello se condimenta con requesón, pecorino (queso de oveja), huevos y pan rallado.
El relleno se coloca sobre un hojaldre muy fino, que se hornea o mejor aún, dentro de "testi", antiguos recipientes típicos de Lunigiana, que se calientan sobre el fuego.
