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El Parque de Cascine en Florencia

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Elementos de la naturaleza

Nacido como una finca agrícola de los Medici, hoy es el gran pulmón verde de la ciudad

El Parque de Cascine, situado en la orilla derecha del río Arno, tiene una extensión de 118 hectáreas y es el mayor parque público en Florencia. Las construcciones, que eran parte de una vasta finca agrícola propiedad de Alessandro y Cosimo I de los Medici, estaban destinadas como vedados de caza y cría de bovinos. El nombre "cascina" indicaba un círculo de haya utilizado para prensar la leche con la que se producía el queso.
Con el paso del Gran Ducado a la familia Lorena, Cascine se convirtió cada vez más en un parque abierto al público en ocasiones especiales.
Las primeras obras importantes de transformación de la finca con parque se realizaron a partir del 1786, siguiendo el proyecto de Giuseppe Manetti. A lo largo de un recorrido simbólico se trasladaron una serie de mobiliarios y arquitecturas, entre las que destacan el Palacio Real, el abrevadero Quercione, llamado Fuente Boccacce, la pirámide que era un depósito para el hielo (donde hoy en día se guardan las herramientas de los jardineros) y las dos jaulas para pavos reales, originalmente llamadas faisaneras, en forma de templetes neoclásicos.

Bajo Elisa Baciocchi, durante el periodo napoleónico, este lugar se convirtió en un verdadero parque público. Durante el siglo XIX hicieron numerosas obras de ampliación y reajustes y el parque fue adquirido por el Municipio de Florencia en el 1869, mientras que durante el siglo XX fue cada vez más popular para actividades deportivas, como carreras de caballos, tenis, tiro al blanco, tiro al plato y natación en la piscina Pavoniere.
En el 1937, siguiendo el proyecto de Raffaello Fagnoni, se construyeron los edificios donde se encuentra la Escuela de Aviación. La Gran Finca Ducal que actualmente es actualmente la sede de la Facultad de Agricultura de la Universidad de Florencia, que ha enriquecido el parque con cultivos especializados en los alrededores del edificio.
El parque ha mantenido su aspecto monumental,
a pesar de las numerosas intervenciones en los dos últimos siglos, caracterizado por extensas praderas, impresionantes calles y el bosque de cedros del Atlas, olmos, pinos, castaños de indias y álamos.

Informaciones sobre la accesibilidad: feelflorence.it