Convento de los Agustinos de Certaldo
Entre arte sacro, historia y espiritualidad: una inmersión en el corazón medieval de Certaldo a través del complejo agustiniano, guardián de la memoria de Beata Julia y Giovanni Boccaccio
El Convento degli Agostiniani de Certaldo, en el pueblo medieval de Certaldo Alto, incluye la Chiesa dei Santi Jacopo e Filippo, iglesia construida en el siglo XII que alberga los restos de la Beata Julia de la Rena y el cenotafio de Giovanni Boccaccio. La iglesia, que da a una pequeña plaza que fue el cementerio del convento, fue confiada a los agustinos antes de 1422, quienes ayudaron a difundir el culto a la beata y desempeñaron un influyente papel en la zona. El claustro románico de dos niveles tiene forma trapezoidal irregular y columnas de ladrillo con capiteles de piedra, que crean un original efecto de perspectiva. De aquí se accede a la evocadora celda de Beata Julia, que vivió recluida durante treinta años, dedicada a la oración, en soledad hasta su muerte en 1367. Beatificada por Pío VII en 1819, sigue siendo venerada como patrona de Certaldo.
El Museo di Arte Sacra, inaugurado en 2001, expone obras y objetos de iglesias de la zona: cuadros de Ugolino di Nerio, Puccio di Simone, Cenni di Francesco, Ridolfo del Ghirlandaio y obras relacionadas con Poccetti y su escuela, dos vírgenes del siglo XIII atribuidas al Maestro del Bigallo y a Meliore di Jacopo, un tríptico del siglo XIV, así como crucifijos de madera, ornamentos litúrgicos renacentistas y orfebrería sacra. Destacan el cáliz de 1496, el incensario del siglo XIII, un portapaz atribuido a Filarete y una serie de cruces de procesión de cobre dorado del siglo XIII.
En particular, la Sala della Compagnia alberga una Virgen con el Niño y santos atribuida a Gabriele Grassi, estatuas de madera de los santos agustinos Nicolás de Tolentino y Juan de San Facundo, y un grupo del siglo XIX dedicado a Beata Julia esculpido por Antonio Rossi; mientras que la Colección Linari, donada en 2014 por Aloma Bardi y Gabriele Boccaccini, incluye retratos españoles del siglo XVII y un lienzo de Ciro Ferri, conservados originalmente en la villa del siglo XIX de Girolamo Mancini en Linari.
