A tiro de piedra de Limite sull'Arno, encaramada en la colina del mismo nombre, en las laderas de Montalbano, se encuentra el Area archeologica de Montereggi, un lugar que relata siglos de historia etrusca y mucho más. Las excavaciones realizadas a lo largo de varias campañas han sacado a la luz los restos de un antiguo asentamiento, activo entre los siglos V y I a.C., en una posición estratégica en la ruta fluvial del Arno, que antaño conectaba la zona del interior con Pistoia y más allá.
La presencia de numerosas ánforas de importación sugiere que aquí hubo un puerto de escala, un punto de intercambio y tránsito comercial. Las edificaciones halladas indican un asentamiento bien organizado: las laderas de la colina se utilizaban para viviendas y la vida cotidiana, mientras que la explanada de la cima estaba reservada al culto, probablemente una zona de templos, como sugieren los objetos votivos y los vestigios de muros descubiertos en la acrópolis.
Los testimonios más antiguos incluyen fragmentos de cerámica y ánforas que se remontan al periodo "protovillanoviano" (siglos XII-XI a.C.), mucho antes de la llegada de los etruscos. Bajo el dominio romano, hacia el siglo I a.C., el asentamiento fue abandonado, quizá también debido a la escasa capacidad defensiva del lugar, pero sus huellas han perdurado en el tiempo, proporcionándonos hoy un valioso patrimonio arqueológico.
En 1986 se fundó el Parque Arqueológico de Montereggi, una zona accesible al público donde es posible pasear entre restos antiguos e imaginar la vida que animaba la colina siglos atrás. Investigaciones recientes han sacado a la luz imponentes restos de muros de arenisca, con grandes sillares y una considerable elevación, que sugieren un complejo sistema de aterrazamientos en la cima de la colina.
Los materiales hallados – vasijas, objetos de metal, útiles de hilado, recipientes domésticos y cerámica pintada– se exponen ahora en el Museo della Ceramica de Montelupo Fiorentino, ofreciendo una visión tangible de la civilización que habitó estas tierras.
Visitar Montereggi es sumergirse en su historia milenaria, suspendida entre la naturaleza, la arqueología y la memoria. Una ruta ideal para quienes deseen redescubrir las raíces etruscas de Toscana caminando por un paisaje virgen que aún conserva el encanto de un pasado lejano.