Las Murallas de Florencia
Primero ha sido un Convento, luego una cárcel y ahora un espacio de recreo y de viviendas renovado sobre la base de un proyecto de Renzo Piano
El Complejo Monumental de las Murallas se encuentra en Florencia, en la zona comprendida entre Santa Croce y las calles de circunvalación, no lejos de la Plaza Beccaria. Ocupa un amplio rectángulo (unos 14.500 metros cuadrados) que encierra entre sus altos muros tanto espacios recreativos y comerciales como viviendas y oficinas.
Originalmente era un monasterio del Siglo XV dedicado a la Santissima Annunziata y Santa Caterina, habitado por monjas de clausura llamadas "murate". Luego, durante cien años, desde el 1883 hasta el 1985, fue la prisión de Florencia.
Hoy en día se ha convertido en un animado espacio urbano remodelado a partir de un proyecto del arquitecto Renzo Piano.
Las dos plazas (Plaza de las Murallas, al este, y Plaza de la Virgen de la Nieve, al oeste) son agradables puntos de encuentro para quienes desean disfrutar de una pizza o un aperitivo en una estructura llena de historia, pero al mismo tiempo interesante por su brío contemporáneo.
De hecho, las Murallas tienen también una vocación expositiva gracias al MAD (Murate Art District) que, en los lugares que ocupaba precedentemente el antiguo convento, realiza diversas actividades culturales como cursos, conferencias y eventos centrados en temas contemporáneos y lenguajes artísticos. El Espacio Revistas y las Residencias para artistas se dedican a la creación, la investigación y la formación.
En ocasiones especiales, MAD organiza visitas guiadas al interior del Carcere Duro, un valioso testimonio de la Resistencia. Los visitantes pueden ver de cerca las celdas donde se encontraban los partidarios de la hoja clandestina “Non Mollare!", la primera oposición al fascismo en Florencia. Carlo Levi también estuvo encarcelado aquí hasta el día después de la caída de Mussolini.
Por último, las Murallas también alberga espacios para convenios, un gran patio para el aparcamiento y la Capilla de la Virgen de la Nieve, cuya fachada forma un conjunto con la parte más alta del recinto amurallado.
