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El pueblo de Ponticello en Lunigiana

Ponticello

Un laberinto de túneles, arcos y casas fortificadas donde reina el silencio y el tiempo parece haberse detenido en la Edad Media

El pequeño pueblo de Ponticello, en el Municipio de Filattiera, se desarrolló a finales del Siglo XIV y principios del XV a lo largo del tramo de la Vía Francígena que atraviesa Lunigiana
El pueblo es uno de los núcleos medievales mejor conservados del territorio; se accede a él llegando por detrás del oratorio del Siglo XVII dedicado a los Santos Rocco y Bernardo, reconocible por su cúpula de cobre, añadida en el Siglo XIX tras las obras de restauración.

Ponticello es muy pequeño en tamaño, pero es una verdadera joya de la arquitectura medieval. El pueblo es completamente de piedra, lleno de pequeñas plazas, patios y callejones. Lo que más llama la atención es el gran número de pasillos cubiertos: arcos ojivales, de medio punto y de cañón conectan entre sí las estrechas calles y las viviendas, a muchas de las cuales se accede por escaleras de piedra.
Una de las principales características del pueblo de Ponticello son las casas-torres. Llamadas en el lugar caminà, este tipo de viviendas se originó como un edificio fortificado: la entrada estaba en el primer piso y se accedía a ella mediante una escalera retráctil; en los pisos superiores se encontraban las habitaciones, mientras que la planta baja (dotada únicamente de hendeduras) se utilizaba como almacén.

El nombre de Ponticello deriva probablemente de un puente construido sobre el río Oriolo (tal vez llamado originalmente Riolo, piccolo rio); lamentablemente, ninguno de los dos existe en la actualidad.
Sin embargo, entre las evidencias históricas más recientes se encuentra aquella en la cual el pueblo estuvo involucrado en los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial: hubo presidios militares en los alrededores, y se sabe que el pueblo fue bombardeado, afortunadamente sufriendo pocos daños, en una ofensiva que provocó el éxodo de la población hacia lugares más seguros.
Abandonado durante mucho tiempo, Ponticello ha renacido y cada año se celebra el evento I Mestieri nel Borgo, de tipo histórico-artesanal que muestra, cuenta y preserva el conocimiento de los antiguos oficios.

Lunigiana